No voy a mentir...la primera vez que vi Chainsaw Man no me gustó. Pero como dije, no voy a mentir, y reconozco que no podía estar más equivocado. Pero recapitulemos.
Ante la premisa de un chico que caza demonios con la ayuda de otro demonio me encontraba ante un argumento genérico para un shonen, hasta ahí todo bien (me gusta el shonen, así que eso no supuso un problema), pero el concepto general de la obra no acabó de convencerme (y ahí empezó mi error).
Hicieron falta pocos capítulos para que se derribaran todas mis dudas acerca de esta obra, y es que Chainsaw Man no es un shonen más.
Lo primero que me sorprendió fue lo crudo y visceral que es el mundo creado por Tatsuki Fujimoto. Escenas de acción llena de violencia explícita, la frialdad con la que describe al mundo y al ser humano.
Si bien es cierto que el autor ha creado otras obras con este carácter (véase Fire Punch), pero aun así fue una sorpresa tratándose de un shonen. También el ritmo de la obra ayuda, es vertiginoso en el buen sentido de la palabra, la historia avanza rápido, pero sin excederse.
Otro aspecto, y opino que el más relevante de la obra, son sus personajes y su interacción. Empezando por Denji, el protagonista, un chico ingenuo atado por una deuda que no puede saldar, la manera que enfrenta los problemas y sus sueños (y no, no sueña con ser el más poderoso) nos hacen avanzar en la historia y en su camino nos encontraremos con personajes que no dejaran indiferente a nadie, y sobre todo con un antagonista que genera tanto repulsión como incertidumbre y sobre todo odio (lo cual lo convierte en un gran antagonista). Sin dejar de mencionar a los compañeros que crearán uno de los vínculos mas entrañables que haya podido disfrutar en un manga (mención honorífica a Pochita).
El diseño de personajes en general es bastante sencillo, pero los diseños de los demonios, así como los paneles de acción están llenos de detalles. Las escenas son realmente explícitas, el autor no huye de mostrar mutilaciones o desnudez, un factor relevante puesto que uno de los temas mas frecuentados en la obra son los instintos mas básicos del ser humano. Lujuria, violencia, miedo, son algunos de los temas mas recurrentes y exponer a los personajes sin censura es una magnifica forma de representarlos.
Así que recapitulando una vez más, Chainsaw Man es un manga sencillamente genial, la expectación va in crescendo a medida que avanza la obra, la contraposición de lo salvaje del mundo de Fujimoto frente a la inocencia de Denji, las peleas épicas, y alguno de los personajes mas memorables que he podido conocer. Todo ello me hace pensar que realmente mentí cuando dije que no me gustaba Chainsaw Man.
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