Ya hemos podido disfrutar de Kimetsu no Yaiba: Rengoku Gaiden, el esperado spin-off de la obra de Koyoharu Gotoge. En este caso el dibujo corre a cargo de Hirano Ryouji, quien ya se había hecho cargo de dibujar el Gaiden del Pilar de Agua Tomioka.
En esta ocasión nos presentan a un Rengoku joven, antes de convertirse en Pilar. El cazador de demonios emprende el capitulo en su casa, donde su padre lo trata con una actitud fría tanto a él como a su hermano menor, afirmando que no son dignos de ser nombrados Pilares de Fuego.
Pero esto no desanima a Senjoru, el hermano menor de Rengoku, quien le confirma a su hermano que seguirá entrenando para ser tan fuerte como el.
Es ahí cuando vemos un flashback del propio Rengoku teniendo una conversación con unos jóvenes durante la selección final. Tras conseguir superar la prueba formando equipo con los jóvenes, Rengoku recuerda que pensó que ellos no vivirían mucho tiempo. Y recuerda que en ese momento cuando su padre empezó a ser distante con él.
La acción vuelve a Rengoku ya convertido en cazador y vistiendo el uniforme de la orden, encontrándoselas con un demonio. Este le confiesa al futuro Pilar que ha asesinado a nueve cazadores y que pronto el se unirá a ellos.
En ese momento Rengoku recuerda las palabras de su padre quien le decía que la gente que dependía de otros acababa siendo asesinada.
Lleno de ira comienza a atacar, pero el demonio consigue evitarlo y emplea una flauta, la cual tiene alguna clase de poder demoniaco, Rengoku se cubre los oídos para evitar el embrujo, pero el demonio invoca unos perros que van a atacar al joven. Dandole solo la opción de taparse los oídos y ser atacado por los perros, o intentar defenderse y caer en el embrujo.
Pero cuando todo parecia perdido, Rengoku piensa en como los cazadores se habían sacrificado para salvar a sus compañeros, y soltando las manos emplea su postura de fuego para derrotar a los perros y al demonio, quien queda asombrado mientras su cuerpo se desvanece. El demonio se da cuenta de que Rengoku golpeo sus oídos para evitar el sonido de la flauta. El cazador afirma que gracias a la postura de la mano uno de sus compañeros asesinados fue capaz de descubrir la debilidad del demonio y mientras sostiene su mano afirma que algún día espera ser una gran persona como el cazador caido.
De esta forma concluye el episodio, el cual nos enseña la forma de ser tan peculiar que tiene Rengoku, su particular manera de hablar gritando debido al daño que sufrieron sus oídos, su pasado siendo despreciado por su padre, o su forma de apreciar a sus compañeros.
Y vosotros ¿habéis leído el spin-off?, ¿teens ganas de mas historias de Kimetsu no Yaiba?
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